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Cómo hacer un buen comentario de texto para tu oposición

En muchas oposiciones, especialmente en las oposiciones de Educación, alguna de las pruebas suele consistir en un comentario de texto. Existen numerosas variantes: literario, filológico, histórico, jurídico-administrativo, etc. Aunque cada uno de estos comentarios requerirá de unos conocimientos de base diferentes, que se adquirirán mediante el estudio del temario correspondiente, los pasos necesarios para hacer un buen comentario de texto son casi siempre los mismos.

Partes del comentario de texto

Partes de un comentario de texto

Del mismo modo, toda recomendación se podrá aplicar prácticamente en cualquier ámbito, pues se trata de una prueba bastante sistemática. A continuación te explicamos cómo hacer un buen comentario de texto para tu oposición, independientemente del contenido de la misma.

1. Identificación del texto

En primer lugar, averigua qué tipo de texto tienes entre manos: un editorial, un proyecto de ley, uno narrativo, etc. Si eres capaz de identificar el texto concreto y su autor, mucho mejor. Asimismo, es esencial indicar el tema y resumir brevemente el contenido del mismo.

2. Análisis de la estructura externa

Aunque este aspecto será más importante para unos textos que para otros, siempre se recomienda analizar la distribución de la información en apartados y párrafos. La organización del contenido, aunque parezca irrelevante, puede ayudarnos enormemente a identificar la intención del autor.

3. Análisis del contenido

Aquí entra en juego todo el conocimiento adquirido durante la preparación de las oposiciones. No olvides relacionar en la medida de lo posible el contenido del texto con el temario estudiado para demostrarle al tribunal de la oposición tus competencias.

4. Conclusión

En este apartado final, resume brevemente los puntos más importantes del comentario.

Exámenes de la oposición a celador

Consejos para hacer un comentario de texto

Conocer las partes que debe contener un comentario de texto no es suficiente. Para superar esta prueba no basta con realizar un análisis correcto. Las oposiciones son procesos cada vez más competitivos si cabe, por lo que tienes que dar lo mejor de ti mismo en todo momento.


Hacer un comentario de texto perfecto conlleva una importante preparación previa y una enorme organización durante la prueba en sí. Es importante tenerlo todo controlado para conseguir esa ansiada plaza de funcionario. No te preocupes, a continuación te ofrecemos unos sencillos consejos para hacer un buen comentario de texto para tu oposición.

Antes de la prueba:

Consulta comentarios de texto ya resueltos. Existen numerosas páginas web especializadas en la preparación de oposiciones donde podrás encontrar ejercicios ya resueltos. En ocasiones hasta van acompañados de explicaciones. Además, si te estás preparando en una academia de oposiciones, siempre podrás pedir a tus profesores que te faciliten algún ejemplo de referencia.

Hazte con algún manual. Si bien la experiencia de antiguos opositores suele resultar de gran ayuda, no hay nada como las explicaciones de los expertos en la materia. En cualquier librería que cuente con material para preparar oposiciones podrás encontrar una amplia gama de manuales para el comentario de texto especializado.

El día de la prueba:

Aprende a controlar los nervios. Es lógico que llegues nervioso a la prueba. Sin embargo, nadie mejor que tú para saber qué te tranquiliza: una tila, respiración profunda, pensamientos positivos, etc.

Haz una primera comprensión lectora. No solo del texto que tendrás que comentar, también del enunciado de la prueba. Aprovecha esta primera lectura para numerar las líneas para futuras referencias. Esto te permitirá ahorrar algo de tiempo más adelante.

Ve al grano y controla el reloj. Demostrar tus conocimientos es casi tan importante como acabar el comentario de texto. Tendrás que sopesar qué información es esencial si quieres dominar cómo hacer un buen comentario de texto para tu oposición. Así pues, es recomendable vigilar el tiempo que queda.

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Cómo hacer una declaración jurada para las oposiciones

Si te vas a presentar a algún tipo de convocatoria, habrás observado que uno de los requisitos es presentar una declaración jurada para tu oposición. En algunas convocatorias no se incluye el anexo con un modelo de declaración jurada para la oposición. Estás de suerte, porque ya no necesitas a un abogado o un notario al que tengas que pagar para hacer la declaración jurada por ti, sino que puedes hacerla tú mismo. Sí, has leído bien. Nosotros te explicamos cómo hacer una declaración jurada para las oposiciones. ¿Preparado/a?

Cómo hacer la declaración jurada de una oposición

¿Qué es una declaración jurada para la oposición?

Por si acaso la palabra “declaración jurada” te suena a algo muy formal, podemos definirla como un documento en el que manifiestas  por escrito y bajo juramento ante las autoridades administrativas y judiciales, la veracidad de la información que has facilitado. Es decir, si haces la inscripción en unas oposiciones, con una declaración jurada demuestras que tus datos son reales, que no estás mintiendo sobre tu expediente académico y que no estás inhabilitado para desempeñar un cargo de empleo público.

¿Cómo puedo ayudar a un opositor?

Cómo redactar una declaración jurada para la oposición

Existen muchos modelos disponibles en Internet en caso de que tu convocatoria no disponga de un anexo con el modelo de declaración jurada. Sin embargo, dependiendo del cargo al que te vas a presentar, hay modelos que podrían no valerte. Te sugerimos que utilices uno que sea neutral y universal. Ten en cuenta que el lenguaje debe ser jurídico y legal. Ahora, si quieres evitar pagar para que te la hagan y prefieres redactarla tú mismo, coge papel y bolígrafo o simplemente prepara tu ordenador y una impresora y ponte a escribir el modelo estándar que te sugerimos a continuación:

D/Dña. [nombre y apellidos completo], mayor de edad, con D.N.I. nº [número completo del D.N.I.] y domicilio en [municipio donde resides], provincia de [provincia a la pertenece el municipio] calle/plaza/avenida/paseo/carretera [dirección completa] nº / puerta / portal /piso [número], código postal [código postal del municipio] y teléfono [número de teléfono]

DECLARO BAJO JURAMENTO:

[Haz constar aquí todos los detalles y la información por los que manifiestas tu veracidad]

Y para que conste así a los efectos oportunos, firmo la presente declaración en [indicar la fecha]


Firmado: [nombre completo y firma]

Modelo de declaración jurada de oposición

Preparar las oposiciones de magisterio

Si lo prefieres, también puedes utilizar otro modelo más específico para las oposiciones, en el que demuestras que no estás inhabilitado para desempeñar un cargo de empleo público y/o que no has sido apartado de ninguna administración pública:

D/Dña. [nombre y apellidos completo], mayor de edad, con D.N.I. nº [número completo del D.N.I.] y domicilio en [municipio donde resides], provincia de [provincia a la pertenece el municipio] calle/plaza/avenida/paseo/carretera [dirección completa] nº / puerta / portal /piso [número], código postal [código postal del municipio] y teléfono [número de teléfono] Declara bajo juramento, a efectos de ser nombrado [nombre del cargo al que aspiras]

(Para ciudadanos españoles) que no he sido separado de ninguna administración pública ni me hallo en inhabilitación absoluta o especial para el ejercicio de empleos o cargos públicos.

(Para ciudadanos extranjeros) que no me hallo inhabilitado ni he sido sometido a sanción disciplinaria que me impida el acceso al ejercicio de cargo público en este Estado.

Y para que así conste a los efectos oportunos, firmo la presente declaración en [indicar la fecha]

Firmado: [nombre completo y firma]

Así tendrás lista tu declaración jurada para añadirla al resto de documentación necesaria para las oposiciones. Puedes redactarla a tu gusto. Rápido y sencillo, ¿verdad? Ahora que sabes cómo hacer una declaración jurada para las oposiciones, podrás tener guardado tu modelo para otras ocasiones y ahorrarás tiempo y dinero.

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Coaching para opositores: 5 puntos que debes conocer

Prepararse unas oposiciones es algo bastante serio ya que no solo vamos a mostrar nuestros conocimiento en cierto tema, sino que también es una forma de utilizar nuestra mente y de prepararnos para ciertas situaciones como el control de estrés, la gestión del tiempo o el desarrollar un pensamiento positivo para no caerse en el camino. Por ello, existen muchos profesionales, la mayoría psicólogos especializados en coaching para opositores, que ha escrito libros para apoyar a las personas que estudian unas oposiciones o realizan sesiones, tanto individuales como en grupo, donde se intercambian ideas, sentimientos y donde el apoyo psicológico es esencial para poder superar con éxito unas oposiciones.

Coaching para aprobar la oposición

Claves del Coaching para preparar las oposiciones

¿Estás pensando en contratar un coach para aprobar tu oposición? Descubre cómo puede ayudarte este profesional:

1. El coaching no te enseña a estudiar, sino a controlar tus pensamientos

Cuando realizamos sesiones de coaching o leemos información sobre ellos, los consejos que te dan no son para el estudio del contenido de la oposición en sí, sino más bien te enseña técnicas de psicología que te ayudarán en todo el proceso de estudio.

Por ejemplo, cuando alguien se plantea prepararse unas oposiciones, el coaching ayuda a que la persona se vea como funcionario en el futuro, en un puesto que le guste para que así tenga un objetivo que le de fuerzas para empezar.

2. Realizar sesiones de coaching es algo muy personal

Cada opositor piensa de forma diferente y afronta las oposiciones de forma distinta. Por eso, los expertos en coaching para las oposiciones intentan individualizar al máximo las sesiones. Los factores que afectan al estudio y a la preparación de unas oposiciones son muchos, por no decir infinitos, y cada factor puede ser diferente según la vida del opositor:

  • Situación familiar
  • Entorno social
  • Situación laboral
  • Edad
  • Conocimientos en oposiciones
  • Situación personal
  • Comportamiento y forma de ser

Por ello, se intenta siempre centrarse en el día a día del opositor. Un opositor que tenga hijos y trabajo no tiene las mismas dificultades que un opositor que es extranjero y que vive solo. También existen opositores que pueden ser muy positivos y otros que no tengan tanta seguridad en sí mismos.

 

3. El coaching ayuda a llevar una vida saludable

La salud es básica para cualquier estudiante y opositor. Por eso, los profesionales del coaching para opositores pretenden establecer hábitos saludables, como enseñar a comer bien, a realizar ejercicio. Pero el coaching va más allá. No solo se aconseja hacer ejercicio, sino que se intenta crear hábitos mentales sobre ir al gimnasio o correr e intentar hacer ver que es bueno no solo para la salud del opositor sino también para la mente.


De esta forma, no solo se cambiará la forma en la que un estudiante realiza unas oposiciones sino que se cambia la misma vida de esa persona.

4. El coaching también ayuda en los hábitos de estudios

Por supuesto, el coaching ayuda a los opositores a aplicar técnicas de estudio. La organización es esencial cuando se realizan unas oposiciones, por ello, los expertos ofrecen técnicas de gestión de tiempo, técnicas para agilizar la memoria y trucos para poder concentrarse mejor.

Realizar sesiones de coaching te ayudará para analizar tus resultados en el estudio, para aprender en qué has fallado, si has aplicado bien las técnicas de estudio y si estás realizado correctamente los esquemas para tu oposición y los resúmenes.

5. El coaching sirve para motivar

Otro aspecto muy importante a la hora de presentarse a unas oposiciones es la motivación. Por eso, los preparadores te aconsejarán sobre múltiples aspectos que ayudan a mantener motivada tu mente:

1. Visualización de resultados positivos, centrándose en los beneficios del estudio.

2. Visualización de las posibles consecuencias si no se emprenden ciertas acciones.

3. Establecer uno o varios objetivos y visualizarlo, para fijar metas reales en lugar de dificultades.

4. Hacer entender que solo TÚ podrás aprobar, que gracias a tu trabajo podrás obtener una plaza. Nadie estudiará por ti ni tampoco estarán en contra de tu trabajo. Por lo que la única responsabilidad es del opositor.

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¿Qué debes saber sobre la traducción de los proyectos de final de carrera?

No cabe duda de que hacer el proyecto de final de carrera es un hito importante en la vida de todo estudiante. Tras meses de investigación y sacrificio, por fin puedes dar el último paso en el largo camino de tu carrera universitaria. Una vez obtenido el título, no son pocos los que deciden estudiar un máster o algún tipo de MBA en el extranjero o se plantean incluso publicar su investigación. Es bastante probable que en estos casos te exijan una versión traducida de tu proyecto de final de carrera. ¿Lo sabías?

Cómo traducir tu TFG

Consejos para traducir un trabajo de final de carrera

Como es lógico, no puedes dejar la traducción de este trabajo, que tanto esfuerzo supuso, en manos de cualquiera. A continuación te explicamos qué debes tener en cuenta sobre la traducción de los proyectos de final de carrera. ¿Preparado/a?

1. Recurre siempre a profesionales

En primer lugar, es imprescindible acudir a traductores profesionales, especialmente a aquellos que posean un Curriculum Vitae específico como traductor. El hecho de dominar la lengua extranjera implicada en el trasvase no significa que se sepa traducir. Una misma idea no se expresa de la misma forma en distintos idiomas.

Así pues, si le confiamos la traducción de nuestro trabajo de final de carrera a una persona bilingüe sin formación, es bastante probable que el resultado esté repleto de lo que los especialistas denominan calcos. Es decir, que las estructuras propias del español se traducirán de forma literal a la lengua extranjera, aunque esa idea se exprese de otra forma.

La versión traducida, por lo tanto, carecerá de la calidad requerida en el ámbito académico. Sin embargo, esto no es lo único que debes tener en cuenta sobre la traducción de los proyectos de final de carrera.


Examen de la oposición a auxiliar administrativo

2. La especialización también es importante

Además de acudir a traductores profesionales, también es recomendable buscar uno especializado en la materia sobre la que versa el trabajo. Contar con formación en el ámbito en cuestión le permitirá comprender el contenido y, a su vez, garantizará la exactitud del vocabulario de especialidad empleado.

No te preocupes si no encuentras un especialista: un traductor profesional no especializado puede realizar un trabajo igual de bueno, aunque para ello tenga que buscar algo más de información.

Algunos podréis pensar: “Entonces le encargo la traducción a un experto que domine la lengua extranjera”. En este caso, el orden los factores también altera el producto. El experto en la materia con dominio del otro idioma no está formado en traducción y caerá en los mismos errores que la persona bilingüe sin formación. Aunque utilice con precisión la terminología especializada, corres el riesgo de que la traducción no dé la talla.

3. No te fíes de las tarifas extremadamente bajas

Aunque los precios no están regulados por motivos de competitividad, existen unas tarifas orientativas a las que se ciñen la mayoría de los traductores profesionales. Para conocerlas, bastará con consultar la página web de cualquier agencia de traducción. Si alguien te ofrece una tarifa por debajo de estos precios, empieza a sospechar. Es bastante probable que carezca de formación específica y sus servicios no vayan a estar a la altura.

Para evitar estos problemas, si no conoces a ningún traductor profesional, lo recomendable es contactar con una agencia de traducción. Ellos te asignarán de entre su cartera de colaboradores al traductor idóneo para el encargo. Ten en cuenta que, antes de entrar a la agencia, evalúan su trabajo, por lo que la calidad está garantizada. Esto es todo lo que debes tener en cuenta sobre la traducción de los proyectos de final de carrera.

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Consejos para ser admitido en el MBA de tus sueños

Desde pequeño sueñas con ser un alto ejecutivo de una empresa puntera en su sector. Para ello, primero deberás formarte en el mejor máster de administración de empresas. Ahora bien, ¿cómo ser admitido en un MBA? ¿Tienes las cualidades necesarias para formar parte del selecto grupo de expertos en Business Administration? ¿A qué tipo de MBA podrías acceder? Presta especial atención.


No es nada sencillo acceder a un MBA. El proceso de admisión puede volverse interminable, durando meses e incluso años. Además, estas escuelas limitan la cantidad de alumnos por curso, en base casi siempre a su perfil. Así pues, los aspirantes se clasifican según su titulación universitaria y su lugar de procedencia. Muchos de estos centros tienen períodos de admisión muy concretos conocidos como rondas de admisión. Según vayan avanzando las rondas, tendrás menos posibilidades de ser aceptado. A continuación comentaremos varios consejos para ser admitido en el MBA de tus sueños.

¿Qué requisitos debo cumplir para ser admitido en un MBA?

Para entrar en un máster de Business Administration, deberás reunir una serie de cualidades. Si quieres que estas escuelas te abran las puertas, deberás al menos:

  • Haber obtenido un título universitario oficial reconocido por el Ministerio de Educación. Según tu itinerario, tus posibilidades de entrar en una escuela u otra pueden variar. Investiga el perfil tipo de cada una y escoge la que mejor se adapte a tu formación y personalidad.
  • Contar con un buen expediente académico. Para cumplir tus objetivos profesionales a veces se requiere cierto estándar académico. Los MBA no son ninguna excepción. La mayoría de escuelas querrán a los mejores estudiantes entre sus alumnos, los que tengan una carrera académica exitosa y posean un buen rendimiento académico. Siempre puedes dar un paso más y pedir a tus profesores alguna carta de recomendación.
  • Tener un currículum completo. Las escuelas de business mirarán con buenos ojos a aquellos solicitantes con experiencia laboral y un currículum actualizado, ya que indicará cierto espíritu emprendedor.

Situación administrativa de los funcionarios en prácticas

¿Qué debo obtener de antemano para ser admitido en un MBA?

La mayoría de las escuelas de Business Administration basan sus pruebas de admisión en exámenes como el GMAT o el TOEFL. Cabe señalar que cada uno persigue objetivos distintos:

1. Graduate Management Admission Test (GMAT)

Es una prueba que mide la capacidad lógica y numérica del aspirante. Este examen está estandarizado en más de 150 países, si bien tiene su origen en las escuelas de negocio de Estados Unidos. Se puede repetir tantas veces como sea necesario hasta alcanzar la calificación deseada. La prueba se divide en tres partes: una de redacción analítica, otra cuantitativa y una última verbal.

2. Test of English as a Foreign Language (TOEFL)

Es una prueba para evaluar el nivel de inglés. Similar a los conocidos exámenes de Cambridge o Trinity, es el exigido en los centros educativos estadounidenses, especialmente en las escuelas de Business Administration. Consta de cuatro partes, una por competencia lingüística.

Becas para estudiar en Estados Unidos

Becas y ayudas para acceder a un MBA

Uno de los inconvenientes de solicitar plaza en un MBA es el elevado coste de las matrículas. Actualmente existen cursos nacionales, cuyo precio ronda los 6.000 € al año, así como programas internacionales de varios miles de dólares. En la mayoría de los casos, tendrás que solicitar becas y ayudas para estudiantes tanto a las propias escuelas como al Ministerio de Educación para afrontar estos gastos. También es posible recibir ayuda (no financiera, sino para el acceso) de consultores de admisión que, tras analizar tu situación, tratarán de aumentar tus posibilidades de ingreso.

Estos no son solamente consejos para ser admitido en el MBA de tus sueños, sino un recordatorio de lo importante que es luchar por tus objetivos profesionales.

Gemma García No hay comentarios

Ejemplos de rehabilitación de la condición de funcionario

¿La pérdida de la condición de funcionario público es siempre definitiva? La verdad es que, lo mejor es no tener que verse nunca afectado directamente por esta situación. En todo caso, al menos puede servir de estímulo saber que existen ejemplos de rehabilitación de la condición de funcionario. ¿Quieres conocerlos?

¿En qué consiste la rehabilitación de la condición de empleado público?

Hay que advertir a todo el mundo de que hablamos de un proceso que puede demorarse hasta que el funcionario alcance el objetivo final de ser rehabilitado en su puesto de trabajo. Siempre teniendo en cuenta que viene determinado por las causas que indujeron a la pérdida, ya que hay algunas que son más fáciles de subsanar:

  • Nacionalidad: se puede solicitar en el momento que se recupera la española o se adquiere una que sea compatible con el puesto de empleo público que se desempeñaba con anterioridad
  • Jubilación por incapacidad permanente: si desaparece el condicionante que provocaba esa incapacidad. Eso implica que exista la acreditación correspondiente del equipo médico con competencias para emitir esta valoración.
  • Cumplimiento de pena de inhabilitación: al extinguirse la responsabilidad penal y civil correspondiente al delito que condujo a la condena. Debe solicitarse dentro de los plazos establecidos por la ley, si no queda extinguido el derecho a rehabilitación.

Carrera profesional de los funcionarios del Estado

Procedimiento para la rehabilitación de la condición de funcionario

Para quienes se encuentren en cualquiera de las tres condiciones que permiten la solicitud de su rehabilitación como funcionarios, el proceso para conseguirlo es el mismo. Consta de tres etapas consecutivas en el tiempo:

1. Iniciación

El primer paso indispensable es que se solicite la rehabilitación. Siempre corre de cuenta del interesado y se debe hacer la petición por escrito, remitiéndola al órgano competente en cada caso. Deben constar obligatoriamente los siguientes datos: fecha y causa de la pérdida, todos los detalles del puesto de trabajo que se ocupaba (unidad, localidad, provincia, situación si no se estaba en servicio activo) y el supuesto al que se acoge para la rehabilitación. Se debe incluir cualquier detalle o circunstancia que se considere relevante.

Además, los acogidos al cambio de nacionalidad deben presentar la certificación literal del Registro Civil que demuestre la recuperación o cambio de nacionalidad.

Los sujetos al supuesto de incapacidad tienen que pedir que se le haga el correspondiente reconocimiento médico por el Equipo de Valoración de Incapacidades del Instituto Nacional de la Seguridad Social u organismo equivalente, junto a cualquier documentación de su historial médico relevante.


Por su parte, los sancionados por condena de pena de inhabilitación han de documentar que la misma se ha cumplido, según los requisitos establecidos en el Código Penal.

2. Instrucción

El órgano instructor competente estudia la solicitud y puede pedir que se aporte información adicional si lo considera necesario, con un plazo de 10 días para que el interesado lo haga. En el caso de inhabilitación por incapacidad se dirigirá la petición de reconocimiento médico a la unida competente de la Administración.

Los casos de jubilación y nacionalidad tienen como único criterio que se entregue la documentación correspondiente para quedar resueltos con la rehabilitación.

En las inhabilitaciones por condena hay criterios orientativos para la concesión como los antecedentes, la gravedad del delito, el daño causado al servicio público, el tiempo transcurrido o la relación del delito con el puesto desempeñado. Además, se pueden solicitar informes a los responsables de la unidad donde trabajaba el condenado. EL interesado cuenta con 15 días para presentar alegaciones una vez que el instructor de respuesta al expediente.

3. Terminación

Cumplidos todos los trámites de la instrucción, se eleva el caso al órgano competente para la resolución. Hay un plazo máximo de 6 meses para emitirla o se considerará estimada.

Todos los ejemplos de rehabilitación de la condición de funcionario que agoten la vía administrativa pueden acudir a la contencioso-administrativa. En los aceptados, la reincorporación al puesto de trabajo debe producirse en un mes como máximo.

Gemma García No hay comentarios

Causas de la pérdida de la condición de funcionario público

Vamos a desmontar uno de los grandes mitos que hay sobre el mundo del funcionario, eso tan manido de que es un trabajo para toda la vida. No es sólo que tú puedas renunciar en cualquier momento a tu puesto de empleado público. ¡Es que puedes perderlo! Cierto que está muy regulado todo lo que se refiere a las causas de la pérdida de la condición de funcionario público. Pero eso hace aún más importante que las conozcas.

En cuanto a la normativa legal que regula los principales aspectos que afectan a la pérdida de la condición de funcionario, una vez más hay que remitirse al Texto Refundido del Estatuto Básico del Empleado Público (Real Decreto Legislativo 5/2015, de 30 de octubre). Se complementa con el Real Decreto 2669/1998, de 11 de diciembre, que trata específicamente lo relacionado con la Rehabilitación de los funcionarios en la Administración General, aunque esto último no sea objeto de nuestro interés en este momento.

La renuncia a la condición de funcionario público

Básicamente hay dos vías por las que se pierde esta condición, la voluntaria y la forzosa. Eso sí, también conviene recordar, aunque no lo tratemos en este momento, que no siempre es una pérdida definitiva, que hay vías establecidas para recuperarla.


Como punto de partida explicamos que hay grandes diferencias entre la renuncia voluntaria y la separación forzosa de la condición de funcionario. En el primer caso, es un acto más de renuncia de derechos y, por tanto, no requiere de requisitos específicos más allá de los que figuran en el Código Civil (artículo 6.3). Sólo hay una excepción, la que tiene que ver con que se intente usar la renuncia para eludir un expediente disciplinario, un supuesto que se enmarca en los supuestos de fraude de ley.

Además, la citada renuncia no inhabilita a la persona que la solicita para acceder a un nuevo proceso de selección y su consiguiente ingreso a otro puesto de Empleo Público. Debe solicitarse por escrito y recibir la aceptación por parte de la Administración competente.

¿Cómo se pierde la condición de empleado público?

Caso muy distinto es el del funcionario que es separado, de forma forzosa, de su condición. Evidentemente, un asunto tan delicado está muy tasado por una normativa que detalla las únicas causas que pueden conducir a esta situación:

1. Jubilación

Da igual que el trabajador se jubile de forma voluntaria, forzosa (inmediatamente que se cumplen los 65 años, si no se solicita prorroga hasta los 70) o que sea a consecuencia de una incapacitación permanente para el servicio.

2. Pérdida de la nacionalidad

Si el funcionario deja de sustentar la nacionalidad que le permitió el acceso a la plaza (española, de la UE o de un país con acuerdo firmado sobre libre circulación de trabajadores) perderá de forma inmediata su condición de funcionario, salvo que simultáneamente adquiriese una con las mismas características. Debe hacerla firme la misma autoridad administrativa que procedió al nombramiento.

3. Por condena principal o accesoria a pena de inhabilitación absoluta o especial para cargo público

Muchas personas se preguntan si se pueden presentar a una oposición con antecedentes penales. Pues bien, es imprescindible que dicha condena tenga ya carácter de sentencia firme. Hay un matiz importante, una vez cumplida la pena se puede proceder al reingreso si no existe un expediente disciplinario anexo que determine una separación del servicio para este funcionario. Esta sanción sólo se puede dar si se han cometido las faltas disciplinarias calificadas de muy graves en el Reglamento de Régimen Disciplinario de los Funcionarios de la Administración del Estado (RD 33/1986, de 10 de enero). Más información sobre la inhabilitación de los funcionarios.

Aunque sea complicado porque implica dejar de disfrutar de derechos adquiridos tras un duro proceso de selección, hay causas de la pérdida de la condición de funcionario público. ¡Mejor ser consciente de su existencia!

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Requisitos para la adquisición de la condición de empleado público

Todo lo relacionado con la forma de convocar y acceder al cuerpo de funcionarios es objeto de numerosos estudios y controversias. Sin embargo, los requisitos para la adquisición de la condición de empleado público están perfectamente regulados y tasados en nuestra legislación. ¿Quieres saber quién puede ser empleado público? Entonces no dudes en seguir leyendo.

Bajo este concepto de exigencias que determinan la adquisición de la condición de empleado público se recogen las normas que se han articulado para ingresar en el cuerpo de funcionarios de cualquier administración pública. El rigor a la hora de permitir este acceso deriva de la trascendencia de la labor de estos trabajadores. Porque son, ni más ni menos, que los garantes de que se cumplan y desarrollen los intereses generales del Estado.

Ahora que somos conscientes del importante papel que desempeñan, es más fácil entender por qué los procesos selectivos que conducen a su contratación tienen que plantearse preservando los principios de igualdad, mérito y capacidad. Estos son la base de cualquier convocatoria de oposición.


La adquisición de la condición de funcionario público

¿Cómo se gana la condición de empleado público?

Empecemos por recordar que implica tener esa citada condición de empleado público. Porque, no todos los tipos de empleados públicos que están trabajando para la Administración son funcionarios. Sólo se puede incluir en este grupo a las personas que mantienen una vinculación con una administración, regulada estatutariamente por el Derecho Administrativo y que desempeñan un servicio profesional retribuido con carácter permanente.

En principio tiene derecho acceder a un empleo público todo ciudadano que supere un proceso selectivo, cumpliendo estos requisitos para opositar:

  • Ser mayor de 16 años y no superar la edad de jubilación forzosa.
  • Tener nacionalidad española
  • Contar con la capacidad funcional necesaria para el desarrollo del puesto al que se presenta.
  • No tener un expediente disciplinario abierto, ni sentencia que le inhabilite para empleos o cargos públicos.
  • Disponer de la titulación exigida en cada caso.

Pero, aprobar una oposición no te convierte de forma automática en empleado público, aún quedan algunas exigencias que cumplir.

La adquisición de la condición de funcionario público

Esta condición conlleva una serie de derechos y deberes de los empleados públicos que no se disfrutan sino se cumplen los requisitos que señala como obligatorios el Estatuto Básico del Empleado Público. En su Artículo 62 especifica las exigencias para la adquisición de la condición de funcionario de carrera:

1. Haber superado el proceso selectivo correspondiente

Que se debe haber convocado por la administración con competencias en la materia, bajo las premisas de libre concurrencia, transparencia e imparcialidad. Las tres fórmulas más habituales son oposición, concurso o concurso-oposición. Por parte del candidato, es obligatorio que cumpla con todos los requisitos que figuren en las bases de la convocatoria para poder presentarse.

De hecho, desde la publicación de la lista provisional de los aspirantes admitidos y excluidos en la oposición se dispone de un plazo determinado para presentar la documentación que acredite, entre otras cuestiones, la titulación académica.

2. Que se haya producido el nombramiento por el órgano o autoridad competente

Dicho nombramiento no tiene carácter oficial hasta que haya sido publicado en el Boletín o Diario Oficial que le corresponda.

3. Haberse celebrado el acto de acatamiento de la Constitución

Y, si se requiere, del Estatuto Autonómico correspondiente, así como del resto del ordenamiento jurídico que sea preciso en cada circunstancia.

La toma de posesión en el lugar del trabajo de destino y dentro de los plazos que contempla la ley es el último de los requisitos para la adquisición de la condición de empleado público. Este periodo suele ser de un mes o 30 días naturales que se cuentan a partir del nombramiento.

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Consejos infalibles para contestar al tribunal de tu TFG

Como mínimo cuatro años de estudios y esfuerzos, a los que añadir el tiempo dedicado a preparar el Trabajo de Fin de Grado y… ¿nos lo jugamos todo por 15 minutos de exposición oral y esas preguntas de los evaluadores? Mejor que esta no sea la actitud con la que afrontas este último tramo de tu carrera. Sin duda, con estos consejos para contestar al tribunal de tu TFG, tus preocupaciones serán otras.

Prepara y practica, tampoco es que haya que descubrir una fórmula magistral. Este es el mejor consejo para que la defensa de tu TFG sea brillante. Pero, además hay un incentivo más para que te dediques en profundidad a dominar la exposición de tu proyecto. Una buena presentación oral reduce la cantidad de preguntas que hace un tribunal. Y no por capricho, la explicación es lógica, los examinadores preguntan para aclarar dudas. ¡A menos dudas, menos preguntas!

¿Cuáles son las preguntas más frecuentes sobre el Trabajo de Final de Grado?

Seguro que estás pensando que lo ideal sería saber exactamente qué preguntas te hará el tribunal de tu TFG, para llevarlas tan preparadas como la exposición. Pero, eso es más que imposible. Ni los evaluadores saben de antemano lo que preguntarán. Sin embargo, para preparar la defensa de tu TFG o TFM sí puedes hablar con otros compañeros que hayan pasado por ese mismo jurado y que te cuenten que tipo de cuestiones les han interesado. O, mejor aún, estaría bien que vieses las exposiciones de alumnos de tu curso… ¡nada como comprobar de primera mano cómo se desarrollan las cosas!

Podemos adelantarte que se trata de preguntas cuyas respuestas conoce el autor del TFG, casi podríamos afirmar categóricamente que al 100%. Porque se refieren a aclaraciones sobre algo relativo a la metodología utilizada, incluso alguna curiosidad o detalles similares. Sólo a modo de orientación, estos dos ejemplos:

  • Cite cuál es el libro o fuente consultado que más le ha marcado en su proceso de investigación y por qué
  • Qué criterios le han inspirado a la hora de seleccionar el tema

Distintas partes de una exposición oral

Cómo contestar las preguntas del tribunal sobre tu TFG

Más allá de las preguntas concretas que te haga el tribunal, la clave para superar ese último escalón que ponga el broche final a tu carrera, es esencial el cómo te enfrentes a las preguntas del tribunal sobre tu trabajo de final de carrera. Lo que pasa, sobre todo, por tener presente en todo momento que te hayas ante un acto académico, en un contexto formal y que debes mostrar el respeto correspondiente a todos y cada uno de los miembros que lo componen. ¡Nada de familiaridades!


Otros consejos importantes son:

1. Lleva papel y bolígrafo para tomar apuntes, tanto de las preguntas como de cualquier comentario o aclaración que se te haga.

2. Lo normal es contestar a las preguntas juntas, una vez que todos los miembros del tribunal han terminado sus turnos. Tómate unos minutos para organizar las que puedan ser similares y dar una coherencia de conjunto a tus contestaciones.

3. En principio, no conviene que te dejes nada sin responder. Pero, no pasa nada si no has entendido una pregunta y solicitas respetuosamente que te aclaren el punto que te causa confusión. E, incluso, es mucho mejor que seas sincero y reconozcas que no tienes una respuesta concreta, a que divagues o inventes. Para salir del paso, puedes usar fórmulas como “no dispongo de esa información en este momento, pero me comprometo a buscarla y ponerla en su conocimiento”.

4. Las respuestas deben aportar siempre más y estar basadas en conocimientos, no en opiniones. Te agradecerán que seas claro y conciso. Y, desde luego, nada de entrar en discusiones.

Pero, si hay dos consejos infalibles para contestar al tribunal de tu TFG estos son que escuches sin interrumpir y que estés seguro, porque vas a hablar sobre un tema que dominas.

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Cómo organizar tu material para la oposición

A la hora de presentarnos a una convocatoria de este tipo, lo que más quebraderos de cabeza supone es la gestión del temario de la oposición. Los opositores suelen verse desbordados ante la cantidad de folios que tienen entre manos. Una buena organización del material es clave, ya que no solo evitará que te agobies, sino que te permitirá gestionar tu tiempo de forma mucho más eficiente. Así pues, merece la pena pararse a pensar cómo organizar tu material para la oposición detenidamente.


Cómo organizar tu material de papelería para las oposiciones

Por un lado, deberás decidir qué tipo de almacenamiento se adapta mejor a tus necesidades. Cada persona y cada oposición es un mundo, por lo que tendrás que sopesar los distintos métodos existentes. Por otro lado, será conveniente elaborar un planning de estudio en tu oposición siguiendo una organización interna del temario. A continuación te presentamos los métodos de almacenamiento más empleados por los estudiantes. Además, proponemos una técnica de estudio alejada del tradicional aprendizaje memorístico.

1. Encuadernar el temario por temas

Se trata del método de almacenamiento de apuntes más habitual. Sin embargo, aplicado al temario de las oposiciones, presenta una gran desventaja: no facilita su actualización. En la mayoría de las oposiciones el temario sufre cambios, si no durante el proceso, al menos de una convocatoria a otra. Por lo tanto, este método no resulta nada práctico de cara a posibles añadiduras. Tampoco permite diferenciar el temario pendiente del ya trabajado.

2. Carpeta de anillas con o sin ficheros

Este método ofrece una enorme flexibilidad: el hecho de que los folios estén perforados permite incorporar fácilmente las modificaciones. Además, combinado con los ficheros de plástico, garantiza una separación clara entre el material repasado y el pendiente, por ejemplo. Se puede emplear una carpeta por tema o por bloque, según la extensión del temario.

3. Carpeta de plástico con o sin ficheros

Este método es la variante ideal para aquellos a los que no les gusta perforar los folios, por el posible desgaste que esto pueda generar. Si tus apuntes están todo el día de un lado para otro, es probable que las perforaciones acaben abiertas. Este sistema se puede combinar con ficheros de plástico o con pinzas de papel para una mayor división.

4. Carpeta de acordeón

Dada su gran capacidad, te permite almacenar gran parte del temario agrupado por temas o incluso bloques. Sin embargo, este método resulta poco práctico si sueles estudiar en la biblioteca, ya que el conjunto suele pesar bastante.

5. Carpeta de anillas y anillas sueltas

En las carpetas podrás almacenar el temario que no estás tocando y el pendiente, aunque fuera de las mismas, quedará perfectamente ordenado gracias a un set de anillas independientes.

Esto no es lo único que debes saber para organizar el material de tu oposición; también es importante planificar de forma eficiente el temario. Es recomendable crear bloques propios, de entre 3 y 10 temas cada uno. No tienen por qué ser unidades correlativas, basta con que estén relacionadas entre sí. De esta forma, el temario te parecerá más asequible.