En este caso no puedes depender de las ganas de estudiar con las que te levantes. ¡Los hábitos de estudio también se aprenden! Son útiles siempre, para preparar cualquier examen. Pero, en el caso de los opositores un buen hábito de estudio es un plus extra. Sois muchos los que tomáis la decisión de preparar una oposición tras años sin estudiar. Aunque los hubieses tenido durante tu época de estudiante, lo más probable es que los hayas olvidado.
Así que, estos trucos para crear un buen hábito de estudio para las oposiciones te vendrán bien en cualquier caso, que nuestra fuerza de voluntad es voluble... ¡Toma nota!
1. Tener una actitud positiva, primer buen hábito de estudio
Antes de abrir una página de tu libro o empezar a escribir, tu mente tiene que estar en la disposición correcta. ¿Y eso cómo se hace? Pues, como ya te adelantábamos, todo se puede aprender. Para que tu mentalidad sea la más adecuada para estudiar prueba a:
- Tener tu autoestima en buen nivel, lo que se traduce en que conozcas tus habilidades y capacidades. Y, sobre todo, que creas en ellas.
- Pero, sin comparaciones. Ni para mejor, ni para peor, cuando te valores no tengas a nadie como referente.
- Evita esa tendencia a ver la botella medio vacía. Ante un imprevisto, no pienses que todavía va a empeorar más.
En el portal Refugiodelalma.com encontrarás muchos consejos para aprender a ser una persona optimista y positiva ante la vida y los estudios.
2. Planificar un horario realista
Vale, ya estás con la aptitud óptima, ahora toca aprovechar bien tu tiempo. Para conseguir este hábito de estudio de todo buen estudiante es imprescindible que trabajes con un horario bien programado. La clave para que no te deprimas es que lo cumplas. Y, para hacerlo, tienes que haberlo programado con la cabeza, no con las ganas de acabar en dos días.
Es esencial que tu calendario de estudio sea lo más detallado posible. Con las tareas desmenuzadas y adjudicándoles un tiempo razonable dependiendo de su dificultad y de lo bien que se te dé ese contenido concreto. Alterna materias o temas más complejos con los más asequibles, es una forma de reforzar tu mentalidad positiva. ¡No olvides de incluir los descansos!
3. La importancia de los objetivos para reforzar un buen hábito de estudio
Estudiar ya es de por sí una actividad lo suficientemente abstracta como para superarnos. Tu mente necesita, como la de cualquiera, fijarse metas más a corto plazo. Ir superándolas es el mejor estímulo para seguir avanzando. Además, felicítate con cada logro. Pero no sólo dándote ánimo, con alguna recompensa que te haga disfrutar.
4. No da igual dónde estudias
No sólo es importante contar con un rincón específico y una zona de estudio en casa bien equipada en la que sentarte a preparar tus oposiciones. El espacio también influye directamente para adquirir un buen hábito de estudio.
Y es que, nuestra cabeza se acostumbra a automatizar ciertas rutinas y es esencial que establezca esa identificación inmediata de tu lugar de estudio. Le costará mucho menos ponerse en modo concentración en el trabajo.
5. La progresión es mejor como hábito que la exigencia
Si quieres establecer un buen hábito de estudio para sacar adelante tu oposición, es importante que pongas las luces largas. Y, aún más que sea progresivo en el establecimiento de tus jornadas de trabajo.
No se trata de ser un coche de Fórmula 1, con un acelerón de 0 a 100. Si llevas tiempo sin coger un libro y quieres retomar los estudios o has entrado en una fase de bloqueo mental mientras opositas, no pretendas estar estudiando 10 horas desde el primer día. Empieza por un par de horas y ves aumentando teniendo en cuenta los resultados que vas teniendo.
Ni son complicados, ni implican ningún esfuerzo añadido. Al contrario, te van a facilitar el trabajo y gestionarás mejor tu tiempo de estudio. Empieza ya a poner en práctica estos 5 trucos para crear un buen hábito de estudio para las oposiciones. ¡No tienes excusa posible!