¿Te gustaría trabajar como registrador de la propiedad en la Administración Pública? Para poder conseguir este puesto de trabajo como funcionario público en España, deberás aprobar las oposiciones al Cuerpo de Aspirantes a Registradores de la Propiedad, Mercantiles y de Bienes Muebles que convoca el Ministerio de Justicia. Sigue leyendo y descubre todos los detalles para preparar las oposiciones a Registrador de 2020: las bases de la convocatoria, el desarrollo del proceso selectivo, el temario que deberás estudiar, etc.
Convocatoria de oposiciones a Registradores de la Propiedad 2020
Las bases de la presente convocatoria de las oposiciones al Cuerpo de Aspirantes a Registradores de la Propiedad, Mercantiles y de Bienes Muebles fueron publicadas en el Boletín Oficial del Estados (BOE) en agosto de 2019. Se fijó un total de 50 plazas a cubrir, reservando un total de 5 para las personas con discapacidad. La convocatoria de 2020 dará comienzo cuando finalice el proceso selectivo de 2019.
Si quieres presentarte a las próximas oposiciones de Registradores de la Propiedad, deberás permanecer atento a las publicaciones que realiza el BOE de forma periódica y a la página web oficial de Registradores de España: http://www.registradores.org
El comienzo de los ejercicios tendrá lugar en un plazo no superior a ocho meses desde la publicación de la convocatoria en el «Boletín Oficial del Estado».
Requisitos para acceder a las oposiciones a Registradores
¿Qué condiciones necesitas cumplir para poder presentarte a las próximas oposiciones de Registradores de la Propiedad? De acuerdo a las bases de la convocatoria publicadas en el BOE, todos los aspirantes deben reunir los siguientes requisitos en la fecha que termine el plazo de presentación de instancias:
- Ser español y mayor de edad
- Poseer el título de Licenciado en Derecho o Graduado en Derecho
- Los aspirantes con titulaciones obtenidas en el extranjero deberán acreditar que están en posesión de la correspondiente convalidación o de la credencial que acredite, en su caso, la homologación
- No estar comprendido en ninguna de las causas de incapacidad del artículo 280 de la Ley Hipotecaria y no haber sido separado del servicio de cualquiera de las Administraciones Públicas mediante expediente disciplinario
- Cumplimentar la inscripción para la oposición y los documentos exigidos en las bases de la convocatoria
- Pagar las tasas del examen de la oposición que, con carácter general, son de 30,49 euros
Temario de las oposiciones a Registrador de la Propiedad
Antes de repasar los temas que deberás estudiar para preparar las oposiciones a Registradores, debes saber que no existe un contenido oficial del temario para esta oposición. Existen diversas versiones del temario publicadas por diferentes editoriales y elaboradas por preparadores expertos en cada materia. Asimismo, la extensión de los temas tampoco está fijada, sino que viene dada por la estructura de cada uno de los ejercicios.
De acuerdo a la Resolución de la Dirección General de Registros y del Notariado de 10 de abril de 1996 (BOE de 25 de abril), el temario de las oposiciones a Registradores cuenta con un total de 372 temas, repartidos de la siguiente manera:
- Derecho Civil: 124 temas, repartidos en cinco bloques: parte general, derechos reales, obligaciones y contratos, derecho de familia y derecho de sucesiones
- Derecho Mercantil: 61 temas
- Derecho Administrativo: 19 temas
- Derecho Procesal: 19 temas
- Derecho Hipotecario: 82 temas
- Derecho Fiscal: 49 temas
- Derecho Notarial: 18 temas
¿Cómo es el proceso selectivo de las oposiciones a Registradores en España?
La oposición de Registrador de la Propiedad es una de las más exigentes, ya que el aspirante deberá realizar un importante esfuerzo de aprendizaje teórico con una elevada carga memorística con la aplicación práctica de lo aprendido. Se estima, además, que el tiempo aproximado para aprobar esta oposición es de 5 o 6 años, aunque este promedio depende en gran medida de las destrezas y la capacidad de cada opositor, así como otras variables, como sus técnicas de estudio, el reparto de tiempo para memorizar los temas, etc.
En general, las oposiciones a Registrador se suelen celebrar en Madrid, en la sede de los Registros de la Propiedad de Madrid, aunque en algunas convocatorias anteriores ha tenido lugar en otras ciudades como Sevilla o Barcelona, y cuentan con las siguientes fases:
- Primer ejercicio: el aspirante dispone de una hora para realizar una exposición oral ante el tribunal de 5 temas del programa escogidos de forma aleatoria:tres temas de Derecho Civil, uno de Derecho Mercantil y uno de Derecho Administrativo o Procesal.
- Segundo ejercicio: consiste en una segunda exposición oral ante el tribunal de otros 5 temas aleatorios del programa: tres temas de Derecho Hipotecario, uno de Derecho Fiscal y uno de Derecho Notarial.
- Tercer ejercicio: desarrollo de un caso práctico en el que el aspirante debe determinar si los documentos presentados son aptos para su inscripción o no en el Registro de la Propiedad y, en este caso, explicar los motivos que impiden la inscripción, así como las cuestiones jurídicas que considere. En los días posteriores, el opositor debe leer su escrito ante el tribunal, sin poder introducir cambios o modificaciones en su respuesta.
- Cuarto ejercicio: desarrollo de otro supuesto práctico en el cual el aspirante debe redactar el asiento de inscripción del documento presentado y elaborar la liquidación del impuesto correspondiente. También deberá leer el escrito ante el tribunal.
¿Cuánto cobra un registrador de la propiedad?
Se trata de una de las profesiones más admiradas y valoradas de España, puesto que, como ya has visto, el proceso para conseguir una plaza es un tanto complejo y prolongado en el tiempo. Además, las oposiciones son muy duras y exigen un esfuerzo constante durante cinco, seis o siete años.
En líneas generales, el sueldo mensual de un registrador de la propiedad suele estar en torno a los 15.000 euros mensuales, por lo que el sueldo medio bruto anual oscila entre los 70.000 y los 180.000 euros aproximadamente, aunque conviene saber que el salario definitivo dependerá siempre del destino y las tareas que se desempeñen.