Estudiar es una actividad que requiere nuestra mayor concentración, por eso es importante evitar las distracciones. Para ello, es recomendable contar con un ambiente ideal, especialmente condicionado para estudiar. Además, es necesario habituarse a este ambiente y no cambiar constantemente de lugar.
Para estudiar bien se requiere un lugar apartado de ruidos y distracciones. Solo así podremos concentrarnos y trabajar o estudiar de la mejor manera. También es importante que nos habituemos a este espacio. Así, nuestra concentración se dará casi de manera inmediata.
Sin embargo, si cambiamos constantemente nuestro espacio de estudio, no podremos concentrarnos con la misma facilidad. Primero, será necesario que la mente y el cuerpo se adecúen a este nuevo espacio. Además, un espacio nuevo generará nuestra curiosidad, desviando nuestra atención.
Por estas razones, es preferible ocupar siempre el mismo lugar de estudio. Nuestro cuerpo y nuestra mente ya se encuentran habituados a él, además que tenemos la certeza que está apartado de cualquier tipo de distracciones.