Al hablar de técnicas de estudio, hay un apartado que no suele citarse. Eso de estudiar solo o acompañado parece que no afecte al rendimiento del estudiante. Pues, parece que no es así, que como todo, esa elección tiene consecuencia. Nos ocupamos de la principales ventajas y desventajas de estudiar en grupo. ¡Después, la decisión claro… será tuya!
Así de partida, lo que dice la tradición es que el acto de estudiar es personal, es un esfuerzo individual que debemos realizar en soledad. De hecho, todos recordamos la reacción negativa de nuestros padres cuando, de pequeños, les pedíamos permiso para ir a estudiar a casa de un amigo. Sus respuestas se movían entre el “menuda excusa para irte a jugar” y su cara de desconfianza porque pensaban que no íbamos a ser capaces de aprovechar ese tiempo. Bueno, ahora es cosa nuestra, dale una vuelta después de conocer los pros y los contras de esa idea.
Beneficios de estudiar en grupo
Es evidente que estos beneficios de los que vamos a hablar sólo se producen sí todos los participantes en el grupo de estudio se lo toman en serio. Sin ese compromiso real, nada de lo que te exponemos tiene validez. En el caso de hacerlo, se ha comprobado que estudiar en grupo tiene, al menos, estas ventajas:
- Se puede completar más el temario porque se dispone de más material, ya que se comparten apuntes, libros…
- Mejora, además, la calidad de los conocimientos porque se participa de enfoques diferentes. Las discusiones y análisis desde distintos puntos de vista enriquecen a todos los participantes. En el caso de los estudios experimentales o de ciencias, aún es más fácil comprobar esta ventaja porque si nos atascamos en la resolución de un problema, otro compañero puede ayudarnos a encontrar la solución.
- Nos ayuda a comprobar cuál es nuestro verdadero nivel de conocimientos. Si eres de los que tienen que explicar un tema a los otros, ganarás confianza en tus capacidades. Si vas perdido, te ayudará a apretar y esforzarte más.
- La solidaridad de los demás es un empuje para salvar los momentos de bajón. En cuanto se ve que un compañero decae, ahí están los demás para levantarle el ánimo.
Y, algo que no se percibe en el momento, pero que te puedes tomar como una especie de inversión a futuro. Aprenderás a trabajar en equipo y esto es una de las capacidades que más se valoran en el mercado laboral.
Contras de estudiar en grupo
Claro que, esto de estudiar en grupo tiene sus claroscuros. En el lado negativo de la balanza:
- A la hora de organizar un grupo de estudio, si no se elije bien a los componentes puede resultar difícil coordinar el trabajo y que todos puedan seguir el ritmo. Es importante que nos conozcamos a nivel académico y busquemos personas de niveles similares, para que nadie ralentice o precipite el aprendizaje.
- El otro elemento que ya hemos mencionado, la responsabilidad individual también es decisiva para que funcione esto de estudiar en compañía. Por muy bien que nos caiga una persona, si es el típico que nunca lleva las tareas al día, mejor quedar con el para ir al cine que incorporarle a nuestro grupo de estudio. Lo único que haría es retrasar el rendimiento del conjunto.
- Insistimos en el mismo concepto de rigor. Al estudiar más de una persona, es más fácil que surjan distracciones. Para paliar esta tentación, podemos quedar un ratito antes para ponernos al día de anécdotas o comentar nuestras inquietudes o programar descansos en los que relajarnos. Así, nos concentramos mejor en los tiempos de estudio.
Al final, esta técnica es útil o no dependiendo de que sepamos manejar las ventajas y desventajas de estudiar en grupo. ¿Por qué no probar?